Las Naciones Unidas urgen a los países a hacer una transición rápida a economías de energía limpia para cumplir con los objetivos del acuerdo climático de París

 

En los últimos años, al menos 749 municipios en 16 países diferentes que representan a más de 138 millones de personas han declarado la emergencia climática. Estas declaraciones varían ya que algunos requieren cambios específicos en las políticas, mientras que otros siguen siendo gestos simbólicos, pero todos reconocen los riesgos crecientes y catastróficos asociados con el cambio climático.

 

Los activistas ambientales están apuntando a los gobiernos locales en esta campaña para construir un movimiento de base global para lograr el acuerdo climático de París, que busca evitar que las temperaturas globales suban más de 1.5 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales.

 

"Las ciudades y los gobiernos locales han sido históricamente la chispa para el progreso, desde el salario mínimo hasta los derechos civiles", dice Climate Mobilization, un grupo ambiental que rastrea las declaraciones de emergencia climática a través de su sitio web. “Las victorias locales inspiran a otras comunidades a seguir y crean un mandato para las movilizaciones nacionales muy necesarias”.

 

Cada gobierno que se une al movimiento, no importa cuán pequeño sea, se suma al impulso y ayuda a inspirar a otros. Desde 2016 se han lanzado esfuerzos, en especial desde los principales municipios que tienen el poder de influir en el status quo global.

 

 

Estos son siete países y ciudades influyentes que han declarado emergencias climáticas

 

 

Hoboken

 

Hoboken, Nueva Jersey, Estados Unidos, se convirtió en la tercera ciudad del mundo y la primera ciudad de los Estados Unidos en declarar una emergencia climática en 2017. El anuncio de la ciudad preparó el escenario para que otros gobiernos de todo el mundo asuman compromisos similares, y mostró que la gente común puede estimular a los legisladores a intensificar y enfrentar el cambio climático.

 

En su anuncio, Hoboken cubrió temas como el aumento del nivel del mar, el aumento de las súper tormentas, la energía renovable, las emisiones de gases de efecto invernadero, el empleo sostenible y más.

 

"Al negar, minimizar y no responder con firmeza a la emergencia climática global, nuestros funcionarios gubernamentales federales y estatales han puesto en peligro a la gente de Hoboken", escribieron los miembros del consejo de la ciudad en la declaración apoyada por unanimidad.

 

 

Ottawa

 

Ningún país ha reconocido la crisis climática de manera tan uniforme como Canadá. En todo el país, 438 municipios han declarado emergencias climáticas, lo que hace que sea el líder del movimiento global a nivel local.

 

La declaración de Ottawa es especialmente significativa porque es la capital del país. Los representantes de la ciudad dijeron que los efectos del cambio climático ya eran evidentes.

 

"El año pasado los tornados, y antes de eso las inundaciones de este año en West Carleton, Cumberland y Britannia. Definitivamente hay una conexión y creo que cuando miras casi todas las revistas científicas y todos los informes que se han publicado sobre el cambio climático, estas no son coincidencias", dijo el alcalde de Ottawa Jim Watson en el momento de la declaración. "En realidad, son serios desafíos para el bienestar del planeta".

 

Unos meses después de la declaración de Ottawa, la Cámara de los Comunes de Canadá votó para aprobar una declaración nacional de emergencia climática, pero el voto aún no ha sido confirmado por la rama federal.

 

 

El Reino Unido

 

El esfuerzo por lograr que el mundo declare una emergencia climática cobró un gran impulso tras las protestas de las protestas Extinction Rebellion el Reino Unido.

 

Después de semanas de marchas y protestas, el equipo de Extinction Rebellion presionó al Reino Unido para que se convierta en el primer país en declarar formalmente una emergencia climática.

 

"No tenemos tiempo que perder", dijo el líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, al parlamento, reportado por The Independent. "Estamos viviendo una crisis climática que se saldrá peligrosamente fuera de control a menos que tomemos medidas rápidas y dramáticas ahora".

 

Irlanda

 

Una semana después del anuncio del Reino Unido, Irlanda se convirtió en el segundo país en anunciar una emergencia climática.

 

Al igual que su vecino, el anuncio de Irlanda es en gran parte simbólico. No conlleva nuevos compromisos políticos, y los ambientalistas se apresuraron a criticar la medida como algo vacío.

 

"Declarar una emergencia no significa absolutamente nada a menos que haya una acción que lo respalde", dijo a RTE Eamon Ryan, el líder del Partido Verde. "Eso significa que el gobierno tiene que hacer cosas que no quiere hacer".

 

Sin embargo, reconocer la crisis climática es un paso fuerte en la dirección correcta y podría alentar a los legisladores a aprobar leyes concretas en el futuro.

 

 

Sidney

 

Las declaraciones de emergencia a menudo han incluido compromisos políticos audaces. Cuando Sidney se unió al movimiento en junio, los legisladores anunciaron su intención de aplicar un impuesto al carbono y ayudar a los trabajadores en la transición de la industria de los combustibles fósiles a empleos sostenibles.

 

La declaración de Sidney llegó en un momento en que el gobierno federal de Australia comenzó a ir en la dirección opuesta. Durante las elecciones nacionales, los votantes rechazaron un impuesto federal al carbono y los legisladores han aprobado nuevas minas de carbón.

 

A pesar de estos contratiempos, los líderes de Sidney esperan crear un movimiento ambiental de base.

 

"Las ciudades deben mostrar liderazgo, especialmente cuando no se obtiene ese liderazgo del gobierno nacional", dijo en ese momento Clover Moore, el alcalde de Sidney.

 

 

Nueva York

 

El éxito de Extinction Rebellion inspiró a activistas de todo el mundo y pronto empezaron a ganar miembros en todo el mundo.

 

En Nueva York, el capítulo local del movimiento comenzó a agitarse por una declaración sobre el clima poco después de que el Reino Unido se incorporara.

 

Los legisladores aceptaron las demandas y declararon la emergencia el 26 de junio.

 

"Estamos en medio de una crisis climática", dijo el concejal Ben Kallos, quien presentó la resolución escrita por las organizaciones asociadas, en una declaración antes de la votación. "Nueva York debe tomar medidas audaces para proteger a sus ciudadanos, o sufriremos más aumentos del nivel del mar, más injusticias climáticas y más huracanes Sandys. Debemos enfrentar la crisis climática y ver los problemas sistémicos generales que nos han puesto aquí, ya que esa es la única manera de enfrentarlos completamente".

 

Además del anuncio, Nueva York tiene uno de los planes de acción climática más ambiciosos del mundo.

 

 

París

 

El impulso solo parece estar construyendo. París se convirtió en la última gran ciudad en declarar una emergencia climática el París.

 

Los legisladores municipales dijeron que crearán una "academia climática" para educar al público sobre las consecuencias del cambio climático, y están explorando formas de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

 

Como se trata además del lugar de nacimiento del acuerdo climático de París, este compromiso es especialmente simbólico y podría estimular nuevos anuncios en las próximas semanas y meses.